Marruecos: el esplendor de África a tan solo dos horas de Europa

Amilcar Viñas, histórico asesor de viajes de Jetmar que lidera los Grupos Acompañados, describe a Marruecos como un destino “exótico”, con una gastronomía, edificaciones y paisajes alucinantes. En conversación con el asesor te contamos por qué deberías poner a este país del norte de África en tu lista de próximos destinos
06/05/2024
Tiempo de lectura: 7 minutos

Miles de personas transitan las calles angostas y empedradas de la medina, nombre dado a los barrios antiguos de las ciudades árabes. Se escucha una melodía de flautas, tambores y cítaras, huele a especias y se ven los puestos de vendedores que ofrecen vasijas, telas, alfombras y lámparas. Los colores son vibrantes y contrastan con el naranja gastado de las casas de adobe y piedra. En medio de una ronda de tres hombres tocando los instrumentos, una cobra alza su cabeza y danza al ritmo de la música, provocando tanto asombro como temor en los turistas. Hombres y mujeres locales llevan vestidos largos, sandalias y el tradicional tarbush árabe. Caballos y burros se mezclan con la gente, al igual que los tuk-tuks y componen una escena de caos perfecto.  

Marrakech, la ciudad más popular de Marruecos, desafía todos los sentidos. Es por eso que es un destino indiscutible para tantos viajeros que buscan probar un poco del mundo árabe a tan solo pasos de Europa. Es posible llegar desde Lisboa o Sevilla en menos de dos horas de vuelo. Esta cercanía con el Viejo Continente generó que Marruecos se haya consolidado como un país africano con una mezcla de influencias, desde una cultura mediterránea propia de sus colonizadores España y Francia, hasta una importante islámica heredada en el siglo VII y herencias indígenas del grupo Bereber.  

Sin embargo, como tantos grandes destinos, Marruecos no es solo un país de ciudades antiguas. Un día podés estar visitando medinas de mil años de historia, otro podés estar bañándote en las aguas cristalinas del Mar Mediterráneo, al siguiente te encontrás en la mitad del desierto paseando arriba de un camello y al otro día decidís recorrer las montañas, cascadas y cañones de la naturaleza marroquí.  

Las opciones son infinitas, y por más que los viajeros uruguayos casi siempre deciden combinar Marruecos con Portugal o España, lo cierto es que este país norteño de África merece la pena ser visitado por dos semanas o más.  

Amilcar Viñas, histórico asesor de viajes de Jetmar que se encarga de los viajes de Grandes Grupos Acompañados, describe a Marruecos como un destino “exótico” y “cautivante”, con una gastronomía, edificaciones y paisajes alucinantes. Pero también supone un viaje desafiante para los occidentales y es por eso que insiste en que hay que ir organizados. Tanto si viajás como mochilero, como en pareja o en familia, Amilcar no recomienda improvisar, sino que cree que hay que ir con un esquema de ruta —que se puede flexibilizar— para poder aprovechar al máximo todo lo que Marruecos tiene para ofrecer.  

—¿Qué ciudades y pueblos de Marruecos recomendás para visitar? 

Marrakech, Fez y Casablanca, sin duda. Y también agregaría Chefchaouen, donde trataría de pasar no menos de cuatro o cinco horas para poder estar tranquilo, recorrerlo a fondo, tomar mucho té de menta y comer algo rico. Quedarte una noche no estaría mal. Es un pueblo encantador y cuando te vas acercando al pueblo la carretera tiene un paisaje panorámico montañoso que es espectacular.  

—¿De qué forma recomendás transportarte de un lugar a otro? 

—Marruecos tiene un buen sistema de trenes, que lo han modernizado mucho en los últimos años. Alquilar un auto es una buena opción, aunque es más arriesgada si no viajás acompañado de un guía local.  

—¿Cuáles son los mejores platos marroquíes? 

—El tajín es una especie de guiso para traerlo a nuestro idioma y se cocina adentro de una vasija de cerámica también llamado como la comida. Entonces se cocina de una manera muy particular con el barro y puede ser de atún o de otros pescados, de cordero, de pollo o puede ser totalmente vegetariano. Probar tres o cuatro diferentes en Marruecos, bien vale la pena. Por otro lado, el kefta es una versión de kebab del norte de África y eso es muy rico para comer con las múltiples ensaladas y vegetales frescos que se comen en Marruecos; pero si tenés que comer algo dulce elegí la pastela marroquí, que es una absolutamente maravillosa tarta de hojaldre rellena, por ejemplo, con dátiles y perfumada con canela. Es un postre pesado, pero una tajada de una pastela es un postre ideal para acompañar un buen té de menta, infusión característica de Marruecos.  

—¿Recomendás el viaje al desierto? 

Hay muchas opciones para disfrutar del desierto. Podés recorrerlo en una camioneta 4×4, algo recomendado para todas las edades. Los choferes son expertos y hacen lo que se llama “dune bashing”, que es ir saltando por las dunas. Pero también se puede contratar un vehículo 4×4 y hacer ese paseo por tu cuenta. Es precioso quedarte en el desierto, en una carpa o un hotel para esperar el amanecer porque guarda una cosa muy mística y fuera del tiempo. También desde ahí te ofrecen andar a camello, siempre en grupo para no perderse. Si viajás a Marruecos en invierno u otoño hay que tener en cuenta que de noche en el desierto hace frío, pero con una buena campera térmica y un gorro pasás bomba.  

—¿Cuál es la mejor época para viajar a Marruecos? 

En abril y mayo porque, si bien no es la época ideal para playa, son los meses donde la temperatura es mucho más agradable para hacer todas las recorridas. Durante el verano las temperaturas pueden superar los 40°C y eso hace cuesta arriba la visita por las ciudades y el desierto.  

—¿Qué otros tips esenciales tenés sobre Marruecos? 

Si realmente te interesa conocer el país es recomendable siempre ir con un guía local que hable árabe, no solo para que te explique sobre los edificios históricos, sino para que te ayude a comunicarte por cualquier dificultad o problema que tengas durante el viaje. Por otro lado, Marruecos es un país básicamente musulmán con tradiciones estrictas y por eso no recomiendo que las mujeres viajen solas, pienso que es mejor que lo hagan en grupo

Las cuatro ciudades más populares de Marruecos

1. Marrakech

A lo largo y ancho de Marruecos hay muchas medinas, pero la de Marrakech es la que alberga una vida cultural más completa, sobre todo en la icónica plaza Jemaa el-Fna donde se concentran los vendedores ambulantes, músicos, acróbatas y legendarios cuentacuentos.  

2. Fez

Conocida como la “Atenas de África”, Fez es la capital cultural y espiritual por excelencia. En su medina amurallada, la más grande del mundo con más de 9.000 callejuelas angostas, uno se sumerge en el Marruecos vivo y visceral. Acá se encuentran las mejores cerámicas (sobre todo azules) y el cuero de mayor calidad, pero además es posible disfrutar de mercados de comida callejera con especias que de seguro nunca probaste en tu vida.  

3. Casablanca

Esta ciudad portuaria, llamada así por el color de sus edificios, te permite conocer un Marruecos cosmopolita junto al mar. Tiene una mezcla interesante de arquitectura moderna y colonial y en ella se ubica la mezquita Hassan II, la tercera más grande del mundo.  

4. Kasbah De Ait Ben Haddou

Al recorrer esta medina uno se siente como en una película medieval y, justamente, este pueblo fue escenario de películas y series como Juego de Tronos, Gladiator o La joya del Nilo. Todo el pueblo está construido de manera uniforme de barro y adobe en terrazas escalonada y solo viven pocas familias locales.  

Preguntas frecuentes

  • ¿Cuánto tarda el viaje a Marruecos desde Uruguay? 18 horas 
  • ¿Cuál es la diferencia horaria? 4 horas 
  • ¿Cómo se llama la moneda local? La moneda oficial de Marruecos es el dirham marroquí (US$1 equivale a MAD$10) 
  • ¿Cuál es el idioma oficial? El árabe 
  • ¿Cuál es la población de Marruecos? 36 millones de habitantes    
  • ¿Se exige Visa para ingresar al país? Marruecos exige Visa para los ciudadanos uruguayos y el trámite se realiza en Buenos Aires. 
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